Entre estos voluntarios está el presidente de la Sección de Derechos Humanos, Carlos César Brito.
El piloto, promovido por el Centro de Responsabilidad Social del Colegio, se desarrollará durante 8 días, los miércoles y jueves, organizado en 4 sesiones técnicas, y dirigido a alumnos de 1º y 2º de la ESO. En las sesiones, dos voluntarios les trasladarán con charlas cercanas y apoyadas en Guías didácticas específicas el respeto por los Derechos Humanos.
Estos detalles se han expuesto en una reunión con los voluntarios celebrada en la tarde de ayer en el Colegio con presencia de la diputada Ángela Cerrillos, el diputado Juan Ospina, y la responsable del Centro de Responsabilidad Social del Colegio, Ruth de Miguel.
Al explicar el proyecto, Ruth de Miguel, ha puesto el acento en la importancia de que los voluntarios sean abogados ya que, como tales, “tienen una función social y a través de la educación en derechos humanos pueden fomentar en los adolescentes el respeto, ejercicio y defensa de estos derechos, y eso no puede ser más enriquecedor”.
La diputada también se ha dirigido a los participantes diciéndoles que, como jóvenes y abogados, “tenéis un valor añadido porque sois profesionales con interés en transmitir y sensibilizar de forma altruista a adolescentes en respeto, igualdad, derechos… “Es importante que se cree empatía para que la intercomunicación sea mayor. Podéis transmitir la conciencia social de la Abogacía. Tenéis la ventaja de la proximidad y romper barreras”, ha añadido.
Por su parte, Juan Gonzalo Ospina ha destacado que lo más importante de este proyecto es que es “pionero y piloto” y, desde luego, pone de manifiesto que “para el Colegio es fundamental acercar a la escuela los principios que conforman los Derechos Humanos”.
Este proyecto piloto se enmarca en un amplio programa dirigido a colectivos en riesgo de exclusión que, en este caso, tiene como público objetivo a infancia y juventud.