La diputada de Asuntos Digitales, Esther Montalvá, asiste al Congreso Internacional sobre Economía Colaborativa, Economía Social y Bienestar (ECOEB)

Desde el miércoles, ESIC Valencia se ha convertido en el centro neurálgico de la economía colaborativa en Europa con la celebración del Congreso Internacional sobre Economía Colaborativa, Economía Social y Bienestar (ECOEB), organizado por la Universidad de Valencia y ESIC Business & Marketing School.

Decenas de expertos en distintos ámbitos, desde sociólogos a desarrolladores, marketeros o abogados, se han dado cita para abordar este fenómeno que, si bien ha dejado de ser novedad, sigue llenando portadas a nivel global por los conflictos de competencia que genera con los sectores tradicionales, la dispersión y disparidad regulatoria y, sobre todo, por la amplia aceptación que ha recibido en el mercado.

Compartiendo mesa con los doctores en Derecho Saturnina Moreno, Gemma Patón, Álvaro Antón e Ignacio Ruíz, en su intervención, Esther Montalvá ha analizado los retos para el sector jurídico que suscitan los nuevos modelos de negocio basados en la economía colaborativa y las aplicaciones prácticas en el ejercicio de la abogacía.

La diputada ha señalado que, aunque es cierto que cualquier inseguridad o conflicto social de índole jurídica suele tener una repercusión favorable a corto–medio plazo para la Abogacía, en el ámbito de la economía colaborativa “no puedo más que abogar por el establecimiento de un marco normativo que propicie la interacción entre la administración y las plataformas, que regule la situación laboral de los prestadores de servicios integrados, que establezca los derechos de los usuarios finales en relación a cada sector y que equilibre mínimamente la desventaja competitiva que, a mi entender, sí se genera con el sector tradicional”.

En este sentido, Montalvá ha incidido en que este marco normativo “no sólo otorga seguridad al mercado, sino que le da continuidad, fomentando así mayor emprendimiento, inversión y, por tanto, riqueza en todos los aspectos”.

Sobre el trabajo que realiza el ICAM en esta materia, la diputada responsable de Asuntos Digitales ha explicado que, para el Colegio de Abogados de Madrid, “es un reto mantener a nuestros compañeros informados y actualizados respecto de las novedades normativas que afectan al Derecho de las nuevas tecnologías”. Para conseguir este objetivo, Montalvá ha hecho hincapié en los avances que se están llevando a cabo desde el Colegio, como la creación de una Sección que se dedica en exclusiva a ello, la amplia oferta formativa del Centro de Estudios y el futuro foro tecnológico ‘Abogacía 4.0’: “Estamos en pleno lanzamiento de Abogacía 4.0, un foro con vocación de think tank que reunirá a los empresarios, asociaciones, partidos políticos y juristas más expertos para que las conclusiones que se alcancen no queden en papel mojado”, ha subrayado.

“Estos nuevos modelos afectan directamente al día a día de mis compañeros y compañeras de las ramas de Derecho Digital, Derecho de Consumo, Competencia, Fiscalistas  y asesores de compliance, in houses, laboralistas… más cambios, más interpretaciones dispares en los juzgados suponen para nosotros “sobre- estudio” y “sobre- trabajo”. No nos podemos poner de lado y como colectivo tenemos que tener una postura firme. No obviemos que nosotros tenemos una amplísima responsabilidad para con nuestro cliente”, ha concluido.

La diputada Esther Montalvá con la directora de investigación en ESIC Business & Marketing Shcool Valencia, María Guijarro García

Como conclusión, la diputada ha aplaudido todas las iniciativas que importaban la filosofía colaborativa al marketing en el mercado jurídico pero recordó al auditorio que la profesión de abogado está afectada, además, por normativa deontológica que impide el comisionamiento a terceros, aunque éste se pueda enmascarar bajo un contrato de publicidad.

En la misma intervención, Montalvá ha anunciado que el ICAM se encuentra en este momento confeccionando un informe jurídico que reflejará la postura interpretativa del departamento de deontología de la institución para, según sus palabras, “dotar de la máxima seguridad a todos aquellos compañeros que quieran utilizar las nuevas plataformas para contactar y captar clientela”.

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