- Se ha presentado el “Decálogo para la Transparencia en el Deporte”, en el Palauet Casades, sede de la abogacía barcelonesa, con el fin de impulsar la transparencia como pilar fundamental en la reestructuración del deporte español
- La exposición de esta propuesta ha ido a cargo de Jesús M. Sánchez, decano del ICAB; Javier Orduña, presidente del consejo asesor de los institutos de investigación e innovación jurídica de los Colegios de la Abogacía de Barcelona, Madrid y Málaga; y Jorge de Amilibia y Enrique Arnaldo, presidentes de las Secciones de Derecho Deportivo del ICAB y del ICAM, respectivamente
Los institutos de investigación e innovación jurídica de los Colegios de la Abogacía de Barcelona, Madrid y Málaga, de la mano de las Secciones de Derecho Deportivo del ICAB y del ICAM han presentado en el Palauet Casades, sede del Colegio de la Abogacía de Barcelona, el ‘Decálogo para la Transparencia en el Deporte’. Se trata de una propuesta para la implementación real y efectiva de la transparencia como principio rector que materialice el necesario cambio social que hay que operar en el modelo del deporte español, así como en toda su estructura, gestión y representatividad.
La presentación de este documento la ha realizado Jesús M. Sánchez, decano del Colegio de la Abogacía de Barcelona; Javier Orduña, presidente del consejo asesor de los institutos de investigación e innovación jurídica de los Colegios de la Abogacía de Barcelona, Madrid y Málaga; y los presidentes de las Secciones de Derecho Deportivo del ICAB y del ICAM, Jorge de Amilibia y Enrique Arnaldo, respectivamente.
Durante su intervención el decano de la abogacía barcelonesa, Jesús M. Sánchez, ha destacado el trabajo conjunto realizado por los Colegios de la abogacía de Barcelona, Madrid y Málaga, estos dos últimos encabezados por Eugenio Ribón y por Salvador González, respectivamente, para elaborar este decálogo a través de sus institutos de investigación e innovación jurídica. Sánchez ha afirmado que “la ciudadanía tiene derecho a conocer y disponer de la información que rigen las instituciones, más allá de la Administración de Justicia, y por ello, considera que la transparencia debe ser un valor esencial que regente el funcionamiento de nuestra sociedad”.
Por su parte, Javier Orduña, presidente del consejo asesor de los institutos de investigación e innovación jurídica de los Colegios de la Abogacía de Barcelona, Madrid y Málaga, ha expuesto que la abogacía tiene una importante función social y ha considerado que transparencia es un valor moderno y transformador de nuestra sociedad y se debe incorporar a todos los ámbitos.
Orduña ha expuesto las medidas propuestas en el decálogo y que consisten en:
1. La transparencia como pilar fundamental en la reestructuración del deporte español. Es imperativo el pleno reconocimiento normativo de la transparencia como principio rector que materialice el necesario cambio social que hay que operar en el modelo del deporte español, para que la Ley sea efectiva, precisa y creíble.
2. La transparencia como activo tangible en toda la cadena de control y gobernanza del modelo del deporte español. Se requiere un refuerzo de los deberes de la Administración Pública para garantizar la transparencia en el modelo deportivo español. Ello implica la necesaria sujeción del CSD a las normas de gobernanza (“¿quién vigila al vigilante?”), la transversalidad en la aplicación, una interpretación normativa extensiva o la concreción del régimen relativo al conflicto de intereses y lobbies en materia de deporte.
3. Transparencia: control y seguimiento. La Comisión de Control Económico y el Código de Buen Gobierno necesitan un estatuto propio para garantizar su plena independencia. El control normativo de la Ley debe incluir cuestiones tan relevantes como el sistema de retribución, el régimen de tratamiento o el seguimiento y sanción de las irregularidades detectadas.
4. Exceso de informes técnicos. Mayor burocracia no es mayor transparencia. No se puede valorar únicamente la cantidad de informes generados, sino que se debe aplicar una coordinación con sentido y carácter vinculante, teniendo en cuenta la calidad de los mismos.
5. El canal de denuncias como presupuesto del régimen de transparencia. Los canales de denuncia son imprescindibles para la credibilidad del modelo deportivo, pero necesitan un marco jurídico más amplio, que establezca parámetros mínimos para su correcta regulación.
6. Transparencia y líneas rojas. Es necesaria la limitación en los mandatos, que es un claro potenciador de posibles irregularidades y clientelismo. También establecer un mecanismo o modelo de retribución de las presidencias para cumplir con el principio de transparencia.
7. Transparencia y toma de decisiones. Es fundamental consolidar la figura del consejero independiente en las sociedades anónimas deportivas e impulsar un sistema transparente en la toma de decisiones y un procedimiento de venta pública de la propiedad de los clubes.
8. Transparencia: democracia interna y participación. Se aboga por un cambio real del régimen electoral hacia un modelo más abierto, más flexible, más democrático y más participativo. La actual relevancia de los avales, los miembros natos y el sistema estamentario debe rebajarse en favor de la participación de otros agentes sociales como aficionados o socios. Se requiere un sistema de voto libre, sin condicionamientos previos.
9. Transparencia y comunicación. Se propone el impulso de portales de transparencia con datos sistematizados, accesibles y comprensibles para los usuarios/as, con el objetivo de mejorar la información, comunicación y conectividad de las entidades deportivas.
10. Transparencia y nuevos valores. Se propone integrar la cultura de la transparencia en el deporte con actuaciones específicas: formaciones, reconocimientos, guías prácticas…
Posteriormente, el presidente de la Sección de Derecho deportivo del ICAM, Enrique Arnaldo, ha criticado la actual Ley del Deporte y ha lamentado que, a pesar de la existencia de la figura del ‘Compliance Officer’, las instituciones deportivas no han realizado un auténtico proceso de regeneración basado en la transparencia. Por ello considera esencial trasladar este decálogo a las Administraciones Públicas para que adopten medidas que conlleven una mejor gobernanza en el ámbito deportivo.
Por su parte, el presidente de la Sección de Derecho deportivo del ICAB, Jorge de Amilibia, ha destacado que la abogacía es la que primero detecta los problemas, también en el ámbito del deporte. Ha mostrado su descontento con la Ley del Deporte del año 2022 y ha denunciado que aún no se disponga de un reglamento para desarrollarla. Y ha añadido: “Estamos en un año olímpico y es sin duda una oportunidad para promover e impulsar una regeneración del modelo deportivo español basado en el valor de la transparencia y los valores de honestidad propios del deporte”.
Con la elaboración de esta propuesta la abogacía quiere dar a conocer de forma pedagógica tanto a instituciones deportivas (federaciones, clubs, etc.) como a la ciudadanía en qué consiste el valor normativo de la transparencia, así como su necesaria aplicación en toda la cadena de decisión, control y gobernanza del modelo deportivo español. La voluntad de los colegios y los institutos que han elaborado este decálogo es que el modelo del deporte español pueda ser creíble desde la regeneración que comporta la apuesta decidida por la transparencia.