- Unión Interprofesional de la Comunidad de Madrid, presidida por el decano del Colegio, José María Alonso, presenta una radiografía de los profesionales madrileños
- Para consultar el estudio, pinchar aquí
El 54% de los profesionales colegiados en la Comunidad de Madrid son mujeres, según se deprende de los datos presentados hoy por Unión Interprofesional de la Comunidad de Madrid (UICM) en la sede del Colegio. La radiografía, que se ha realizado con los datos aportados por los Colegios Profesionales que forman parte de la asociación, muestra un análisis de los colegiados madrileños por sectores, sexo y edad.
En total, en la región madrileña hay 311.414 colegiados profesionales. El sector con más colegiados es el sanitario con más de 143.000 (46%). Seguidamente está el jurídico-económico con más de 92.000 (30%) y el técnico con más de 49.000 profesionales (16%).
Por su parte, los sectores con menos colegiados son el de ciencias sociales con casi 22.000 profesionales (7%) y el científico-técnico con más de 3.500 (1%).
II Día de las Profesiones
Estos datos se muestran coincidiendo con el II Día de las Profesiones, que tendrá lugar el 17 de abril en el Colegio de Arquitectos de Madrid (COAM). En este sentido, María-Teresa Estevan Bolea, vocal de la Junta Directiva de Unión Interprofesional de la Comunidad de Madrid, explicó que la celebración de esta jornada supone una oportunidad para que la ciudadanía se acerque a conocer a los profesionales de los diferentes sectores para implicarles en la sociedad con los temas que más preocupan.
Siguiendo su exposición, Estevan Bolea, destacó que de los datos totales de colegiación, el mayor número se concentra en la franja de entre los 30 a los 50 años. En este sentido, manifestó que “esto puede deberse al retraso en la edad de acceso al mercado laboral y a que, durante este periodo de edad, es cuando los profesionales alcanzan la etapa de mayor actividad laboral”.
Mujeres y sectores profesionales
En lo que respecta al sexo, indicó que los sectores en los que predominan las mujeres son el sanitario (71%) y el de las ciencias sociales (65%), mientras que en las áreas jurídicas y científico-técnicas el número de hombres y mujeres está más equiparado. Así, en el sector jurídico las mujeres representan al 46% y los hombres al 54% y en el científico-técnico la proporción es del 49% frente al 51%.
Por último, las profesiones técnicas son en las que predominan los hombres. En concreto, el porcentaje de varones asciende a más del 80%. En este sentido, Lola Norte, doctora ingeniero de minas y primera mujer ingeniero de minas de España, destacó que “en las carreras técnicas, el número de mujeres se sitúa en menos de un 25%, por ello, se debería promocionar y saber aprovechar los efectos de la diversidad y todo lo que las mujeres aportamos a la sociedad y a las empresas”.
Norte señaló que “el deber primordial de los colegios profesionales es el de ser un puente y nexo de unión entre nuestros colegiados, las diferentes administraciones y la sociedad en su conjunto, para poder defender a los profesionales y al mismo tiempo, hacer llegar a la sociedad nuestro trabajo”.
Intrusismo laboral
Además, durante el encuentro se ha puesto sobre la mesa el problema del intrusismo profesional, que no sólo perjudica a los expertos, sino también a los ciudadanos.
En relación a esto, Mercedes García, miembro de la Junta Directiva de la asociación de pacientes Psoriasis en Red, dijo que “creemos en la importancia de que los enfermos sean tratados por sanitarios profesionales cualificados, ya que son personas con la titulación adecuada y saben qué es mejor para su salud. Un profesional colegiado es una garantía para el enfermo”.
También en el encuentro informativo estuvo presente Javier Urra, psicólogo forense y primer defensor del menor en la Comunidad de Madrid, quien puso en valor el papel que tienen los colegios profesionales como garantía para la sociedad. Así, destacó que “entre sus funciones está el continuar la formación de los profesionales una vez terminaba la universitaria, luchar contra el intrusismo y garantizar que la forma de proceder es correcta, ética y deontológica”.