Desde el pasado lunes, 1 de octubre, tal y como se comunicó a través de la web colegial, se están llevando a cabo los traslados de algunas dependencias judiciales a la sede de la calle Albarracín nº31.
Este traslado de órganos judiciales obedece a directrices marcadas por la Consejería de Justicia de la Comunidad de Madrid, que las ejecutará bajo su propia supervisión y entera responsabilidad.
Así, según el cronograma previsto, las dependencias judiciales que van a verse afectadas por los traslados son las siguientes:
- Juzgados, Fiscalía y Decanato de violencia sobre la mujer, desde su actual emplazamiento en la calle Manuel Tovar.
- Juzgados de ejecutorias penales, desde su actual emplazamiento en Plaza de Castilla y calle Hermanos García Noblejas (ahora Avenida de la Institución Libre de Enseñanza).
- Fiscalía de ejecución, desde su actual emplazamiento en calle Capitán Haya (ahora calle Joan Maragall).
- Decanato de Juzgados de lo Penal y Juzgados de lo Penal nº 11, 13, 29, 27 y 31, desde su actual emplazamiento en calle Julián Camarillo. Así como los penales de refuerzo nº 1, 3 y 10, actualmente ubicados en la calle Hermanos García Noblejas (ahora Avenida de la Institución Libre de Enseñanza).
- Servicio de Orientación Jurídica a víctimas de delitos, desde su actual emplazamiento en el TSJM, en calle General Castaños.
- Oficina de Atención a las Víctimas desde su actual emplazamiento en la Calle Barquillo.
El área de la Defensa de la Abogacía ha informado de que los traslados están realizándose con normalidad y según lo previsto. De esta manera, los Juzgados que ya están ubicados en la calle Albarracín son los de Violencia sobre la Mujer nº 5, 6 y 7. Este último ya ha estado practicando actos procesales, como pruebas testificales, sin disfunciones de ningún tipo.
Desde el Colegio se garantiza a todos los colegiados que se mantendrán los servicios tanto en la sede cesante como en la nueva sede en este periodo de transición y que personal del área de la Defensa de la Abogacía del Colegio estará presente en las antiguas sedes de los Juzgados que se vayan trasladando, así como en la nueva ubicación, a fin de atender cualquier incidencia que los abogados pudieran tener como consecuencia de los traslados.