El Colegio de Madrid ha formalizado este jueves el registro de sus nuevos Estatutos ante el Consejo General de la Abogacía Española (CGAE), tras su aprobación con el 79% de los votos emitidos en la Junta General Extraordinaria celebrada el pasado 17 de diciembre.
El decano del ICAM, Eugenio Ribón, entregó personalmente en la sede del CGAE el certificado de aprobación y el texto completo de unos estatutos que marcan un punto de inflexión en la evolución normativa del Colegio, dotando a la institución de un marco jurídico con el que adecuar su gobernanza y sistemas de gestión a las necesidades de la abogacía y la sociedad contemporáneas.
“Estos estatutos reflejan nuestra visión de un Colegio más abierto, participativo y preparado para liderar los retos del futuro. Estamos convencidos de que esta reforma contribuirá no solo al fortalecimiento del ICAM, sino también al desarrollo de la Abogacía en su conjunto”, señala el decano Eugenio Ribón en una misiva dirigida al presidente del CGAE, Salvador González, en la que desglosa los aspectos más destacados del nuevo marco normativo colegial.
Así, entre otras novedades, los estatutos actualizados incorporan de manera expresa la igualdad de género como principio rector en los órganos directivos del Colegio, asegurando una representación mínima del 40% para el género menos representado. Además, los servicios colegiales prestados por el ICAM a partir de ahora un componente de sostenibilidad, con evaluaciones independientes que certifiquen la calidad y sostenibilidad de nuestras actividades
En materia tecnológica, destaca la inclusión del voto electrónico en los procesos electorales, preservando los más altos estándares de seguridad, autenticidad y accesibilidad.
En cuanto a la protección del correcto ejercicio de la abogacía, se refuerza la defensa del secreto profesional como derecho y deber fundamental de los colegiados, dotándolo de una protección integral que incluye la regulación de la confidencialidad de las comunicaciones y la figura del amparo colegial.
Para expandir los horizontes formativos del Colegio, el texto estatutario incluye la docencia universitaria como uno de los fines esenciales de la corporación, dando así un impulso decisivo para la creación del futuro Centro Universitario ICAM, llamado a revolucionar la formación jurídica. y práctico que facilite su transición al ejercicio profesional.
Finalmente, se instaura un marco de gobernanza más abierto y participativo con iniciativas como la creación del Consejo Colegial, que tendrá funciones consultivas en asuntos estratégicos para la abogacía madrileña, y se establecen medidas económicas para promover una gestión transparente y responsable, como la limitación de las subidas de cuotas colegiales al IPC.
