El Ilustre Colegio de la Abogacía de Madrid lamenta profundamente el fallecimiento de Juana Arce Molina, senadora por Albacete en la Legislatura Constituyente de 1977 y diputada en la I Legislatura del Congreso de los Diputados. Su vida pública fue ejemplo de compromiso con la construcción de la democracia y con la consolidación de las libertades en nuestro país.
Nacida en Albacete en 1935 y licenciada en Filosofía y Letras por la Universidad de Granada, Juana Arce fue una de las 27 mujeres que formaron parte de las primeras Cortes democráticas, donde desempeñó su labor parlamentaria en un contexto político e institucional en proceso de transformación. Según recoge el libro Las mujeres parlamentarias en la legislatura constituyente, fue su inquietud por los problemas sociales lo que la llevó a introducirse en política durante la Transición, representando a la Unión de Centro Democrático (UCD) primero en el Senado y, posteriormente, en el Congreso de los Diputados, tras ser elegida en las elecciones de 1979.
Durante su etapa como diputada, fue vocal, entre otras, de las Comisiones de Cultura y de Educación y Ciencia, participando en la elaboración de políticas públicas en un momento clave para el desarrollo democrático del país. En el Senado, formó parte de la Comisión Especial de Investigación sobre la situación de establecimientos penitenciarios y de la Comisión Especial sobre la situación del niño.
Fuera del ámbito institucional, antes de su entrada en política desarrolló su carrera profesional en el campo de la enseñanza y la formación en idiomas. Su perfil figura en el libro Fuimos nosotras, que recoge las trayectorias de las 27 mujeres que integraron las primeras Cortes democráticas, una generación de parlamentarias cuya presencia marcó un hito en la historia política reciente de España y abrió camino a una representación más plural en las instituciones democráticas.
El Ilustre Colegio de la Abogacía de Madrid desea expresar su especial afecto a la familia de Juana Arce Molina, y en particular a su hija, la vicedecana Isabel Winkels, para quien su madre ha representado siempre un referente vital.
Descanse en paz.