El Colegio de la Abogacía de Madrid (ICAM) celebró ayer la presentación del libro Delitos contra la intimidad: desafíos contemporáneos en la era digital, una obra colectiva de la editorial SEPIN, coordinada por el fiscal de Sala Javier Ignacio Zaragoza Tejada, que reúne aportaciones de magistrados, fiscales, académicos y especialistas en cibercriminalidad.
El acto, que tuvo lugar en el Salón de Actos del Colegio, estuvo presidido por el decano del ICAM, Eugenio Ribón, quien destacó la oportunidad de una obra que aborda uno de los retos jurídicos más urgentes de nuestro tiempo. Ribón abrió su intervención dando la bienvenida a los asistentes y recordando que el ICAM es “la casa de los derechos y las libertades”, un espacio en el que resulta especialmente pertinente debatir sobre los desafíos que plantea la protección de la intimidad en la sociedad digital.

El decano agradeció el trabajo del coordinador del libro, subrayando “su trabajo riguroso y su compromiso con la reflexión jurídica de calidad”, y reconoció la presencia del profesor Nicolás González-Cuellar, cuya participación “contribuye a situar el debate en el nivel de excelencia que merece”.
Durante su intervención, Ribón subrayó la relevancia del tema central de la obra: la defensa de un derecho fundamental sometido hoy a amenazas crecientes. “La tecnología multiplica nuestras oportunidades, pero también nuestras vulnerabilidades”, afirmó, destacando que el libro analiza tanto los delitos tradicionales de descubrimiento y revelación de secretos como los nuevos fenómenos propios del entorno digital, desde la difusión no consentida de imágenes íntimas hasta los accesos ilícitos a sistemas informáticos o la geolocalización permanente.
El decano puso especial énfasis en el estudio relativo a la expectativa razonable de privacidad, un concepto que —recordó— “nos recuerda que la intimidad no es ya un asunto limitado a un espacio físico, sino un derecho que acompaña a las personas en su vida digital, en sus comunicaciones, en sus datos y en su huella tecnológica”.

Ribón reivindicó además el papel de la abogacía en este escenario de transformación acelerada: “La tecnología debe avanzar, sí, pero nunca a costa de debilitar derechos fundamentales. La transformación digital necesita, más que nunca, de una abogacía formada, vigilante y capaz de defender a los ciudadanos allí donde hoy se juega su libertad: en el ámbito digital”.
El decano concluyó agradeciendo el trabajo de todos los autores y la presencia del público asistente, subrayando que el ICAM seguirá impulsando espacios de reflexión jurídica ante los retos de la era digital: “Aquí, en este Colegio, siempre encontraréis un espacio para debatir, reflexionar y defender las garantías que sostienen nuestro Estado de derecho”.